El Cambio Climático, ¿nos afecta?

El Cambio Climático, ¿nos afecta?

Eran las ocho y media de la mañana, yo me estaba alistando para ir a gimnasia, me senté para desayunar y prendí la tele, y el noticiero sonaba de fondo, cuando de pronto, antes de cambiar de canal, reproducen un video de Greta Thunberg. Ella hablaba del cambio climático, de cómo este afecta al mundo en muchas ocasiones, y como consecuencia, nos va a afectar a todos. No sabía muy bien a lo que se refería, entonces me decidí a investigar un poco.  Vi la hora, y me di cuenta que estaba por llegar tarde a gimnasia.

Estuve toda la mañana pensando en lo que ella dijo.  Cuando volvía de educación física, me puse a hablar con una amiga del tema, le pregunte si estaba al tanto y si era consiente de este cambio climático, por supuesto que soy consciente, me contestó, es casi imposible no serlo en estos días, los medios de comunicación y fuentes confiables dejan claro que estamos en una mala época; fíjate ya nos está afectando, veranos más fríos o demasiados caluroso, o inviernos extremos que causan cientos de muertes  y los glaciares de derriten a velocidades poco comunes. Posiblemente en algunos años será aún peor.

Empecé a preocuparme, el cambio climático es algo serio, podría decir que comencé a obsesionarme con el tema, los veía y escuchaba por todos lados; días atrás escuche en la radio que se desprendió un bloque de hielo siete veces más grandes que Buenos Aires y 200m, videos de Greta por toda internet. Entonces fue en ese momento cuando me decidí en investigar para ver si existía alguna solución a este cambio.

Comencé preguntado a la gente si eran consiente de este cambio, la mayoría, por no decir todos, me dijeron que sí, que hoy más que nunca. Quisiéramos o no, esto nos afecta de un modo u otro, más inundaciones, incendios, catástrofes naturales, veranos más fríos, inviernos más calurosos, o, todo lo contrario, estaciones totalmente extremas; perdidas completas de glaciares, extinciones de especies entre otras consecuencias.

Me preguntaba si esta situación podía mejorar, mi lado optimista piensa que sí, que hay esperanzas, si todos contribuimos en algo, podemos hacer que esto mejore. Desde el acto más pequeño, hasta el más grande, puede generar un cambio.  Entrevisté a varias personas para saber las acciones que toman para hacer de este, un lugar mejor; reutilización de cosas, evitar la emisión de gases tóxicos, cuidado del agua, no dejándola correr, separando la basura, plantando árboles, reducir el uso de plástico, entre otras alternativas.

En cambio, mi lado pesimista, piensa que ya no hay vuelta atrás, que por más que intentemos no podremos frenar esta catástrofe, si las empresas multimillonarias siguen generando residuos, contaminación, esto va a ser incontrolable. Agroquímicos, fertilizantes en los suelos, deforestación para construir, o aun peor, como en las amazonas se ven columnas de humo que llegan a alzarse más de 500 metros de altura, redes de pesca en los mares, matar excesivamente a los animales para satisfacer nuestras egoístas necesidades.

Pensé durante un rato, entonces me decidí a cambiar mis hábitos, mis comodidades, porque por más que no sea mucho, puede ayudar. Comencé con reducir el uso de plástico y del agua, con mi familia plantamos plantas en nuestra casa. Viendo y escuchando varias personas con experiencia en cambiar su rutina alimentaria, decidí cambiar la mía. Comencé una dieta vegetariana, para seguir contribuyendo, porque el comercio de la carne es tan violento y contaminante como todas las otras acciones que realizan las empresas responsables de estos cambios. El consumo de carne no sólo afecta a la salud de las personas sino también la del medio ambiente; mientras que para cultivar 1 kilo de arroz se necesitan 2.500 litros de agua, la producción de 1 kg de carne de vaca necesita más de 15.000 litros, la alta producción de ganadería contamina los suelos y las aguas subterráneas debido a la elevada concentración de excrementos y residuos fármacos, la ganadería genera más del 14 % de las emisiones de efecto invernadero causadas por el hombre, principalmente por el metano y otros gases de las flatulencias de los animales, el 70% del terreno agrícola del planeta se destina a la alimentación y crianza de los animales de ganadería; por estas y más razones son por las soy vegetariana.

Gracias a esta investigación que llevé a cabo pude abrir mi mente y concientizarme acerca de esta problemática actual que es el cambio climático, y así contribuir con el planeta. Me propuse a mí misma a realizar acciones que ayuden al medio ambiente.